El pasado mes de julio la Comisión Europea presentó la propuesta de reglamento relativo a los requisitos de circularidad aplicables al diseño de los vehículos y a la gestión de los vehículos al final de su vida útil, con la intención de ampliar el ámbito de aplicación, de forma gradual, a nuevas categorías como motocicletas, camiones y autobuses.

Las normas medioambientales de la Unión Europea tienen por objeto garantizar la gestión sostenible de los vehículos al final de su vida útil. Su finalidad es eliminar las sustancias peligrosas en los automóviles y exigir que se reutilicen o reciclen la mayoría de las piezas y materiales de los vehículos que ya están fuera de uso.

Esta iniciativa propone mejorar la recogida, tratamiento y reciclado de estos vehículos. Su objetivo es garantizar la coherencia con los objetivos del Pacto Verde Europeo, animando a la industria automovilística a adoptar un modelo sostenible de diseño y producción de automóviles.

La industria del automóvil se transforma

La propuesta incluye medidas para mejorar la circularidad del sector del automóvil, que abarcan el diseño, la producción y el tratamiento al final de la vida útil de los vehículos. La intención es mejorar el acceso a los recursos para la economía de la Unión Europea, y contribuir a los objetivos medioambientales y climáticos, reforzando al mismo tiempo el mercado único y contribuyendo a abordar los retos asociados a la transformación en curso de la industria del automóvil.

Las acciones propuestas para la transición circular y una mayor resiliencia en el sector del automóvil se centran en la mejora de la circularidad en el diseño y la producción de vehículos, la utilización de contenido reciclado, la recuperación de más materias primas y de mejor calidad, la mejora de la gobernanza a través de sistemas de responsabilidad ampliada del productor (RAP), y recopilar más y de manera más inteligente.

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